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Cómo decorar un mini-loft

Seguramente cuando hablamos de lofts a todos sin excepción nos vienen a la cabeza imágenes de espacios amplios y muy diáfanos. Lugares donde el interior y el exterior pueden llegar a fundirse. Viviendas o negocios donde el espacio se comparte al máximo consiguiente un diseño verdaderamente único.

Sin embargo conseguir un loft de infarto resulta algo más complicado cuando contamos con menos metros cuadrados. ¿Imaginas sacar el máximo partido a un espacio de 20 m2 o menos? Estos lugares son los mini-lofts. Y también se pueden conseguir auténticas maravillas con ellos.

Desde Lofts Barcelona vamos a explicarte cómo decorar un mini-loft. ¿Te gustaría saberlo? En ese caso, sigue leyendo.

Consejos para decorar un mini-loft y no morir en el intento

En estos espacios la decoración minimalista y la funcionalidad son muy complejas. Al carecer de suficientes metros cuadrados hay que tener mucha imaginación para sacar el máximo partido a cada rincón.

Sé creativo con el espacio de almacenamiento

En un mini-loft nunca debemos de perder de vista la posibilidad de utilizar cualquier espacio, por extraño que parezca, para aumentar las posibilidades de almacenaje. Aprovecha todos los lugares, incluso los más raros, y hazlo con cabeza y elegancia. No obstante ten cuidado al hacerlo. No puedes volverte loco con el almacenaje y olvidar que necesitas espacio libre para poder moverte.

Lo mejor en estos casos es recurrir a muebles convertibles que te ofrezcan varias posibilidades. Por ejemplo una pizarra para apuntar los recados que se convierte en una mesa para dos comensales. O una cama que ofrece un espacio de escritorio mientras se encuentra plegada.

Usa colores neutros en los muebles y en las paredes

Aunque seas un amante de los colores fuertes, para decorar un mini-loft y lograr un diseño agradable tienes que decantarte por los colores neutros. Sobre todo en los muebles. Piensa que estas piezas son las más pesadas tanto física como visualmente. De ahí que buscar tonos claros ayude a que parezcan menos voluminosos. Para conseguir texturas contratista los más oscuros con los más claros.

Las paredes deben de seguir el mismo tratamiento que los muebles: cuanto más claras sean más fácil resultará que la luz se refleje y el espacio parezca más limpio y amplio.

Recuerda que el color no tiene por qué estar exento. Pero debes de introducirlo por medio de los complementos.

Presta especial interés a la iluminación

La iluminación natural y artificial es imprescindible para conseguir que un espacio resulte acogedor. No te engañes pensando que puedes pasar con nota colocando una lámpara cualquiera. Lo cierto es que en los espacios pequeños hay que ser muy cuidadoso con este aspecto. Intenta aprovechar al máximo la luz natural creando una distribución del interior que te lo permita.

En cuanto a la luz artificial asegúrate de que está bien pensada. Todos los espacios deben de estar correctamente iluminados y no crear zonas de sombra que resulten incómodas.

Busca una alfombra que unifique

En estos mini-lofts lo normal es que el espacio de esparcimiento sea el mismo que el de descanso. Los metros cuadrados son tan pocos que se debe de compartir el espacio. En estos casos puedes unificar estilos con una bonita alfombra. Busca un diseño que quede ideal en ambos casos. Te recomendamos decantarte por diseños geométricos o de aire étnico. Puedes jugar con los colores y buscar el contraste entre la alfombra y los colores utilizados para pintar las paredes o para los muebles.